Con: John Belushi, Dan Aykroyd, James Brown,
Cab Callodway, Ray Charles, Carrie Fisher, Aretha Frankliln, Henry Gibson, The
Blues Brothers Band.
Dirección: John Landis.
The Blues Brothers es una comedia musical que cierra el ciclo de un tipo de comedias que
tiene su auge en los años sesenta con películas como It’s a mad ,mad, mad, mad world (1963) (El Mundo se ha vuelto loco),
Those Magnificent men in their flying machines (1965).
Como sus antecesoras, The Blues Brothers narra una
historia alocada con una gran dosis de exageración aceptable (decimos “aceptable” para no confundir estas
películas con las comedias absurdamente ridículamente exageradas que proliferan
grotescamente en el cine desde los años noventa), con mucho humor y diferentes
tipos de humor, con bastantes escenas de acción, con grandes artistas, en este
caso, de la música –del blues, específicamente- y, finalmente, con un número
gigantesco de extras.
Los hermanos Blues y el eterno Ray Charles |
La historia de esta película, que tuvo una secuencia en el año 1998 sin
tener el mismo éxito de la original, cuenta los incidentes en los que se meten
dos hermanos, Jake y Elwood Blues, para conseguir, en menos de dos semanas,
cinco mil dólares para pagar los impuestos del edificio donde funciona el
orfanato donde ellos crecieron; caso contrario, el edificio será vendido ya que
la iglesia que lo mantiene no tiene interés en conservarlo.
Conseguir esa cantidad de dinero no es fácil si se toma en cuenta que Jake
acaba de salir de la cárcel; sin embargo, a los hermanos se les presenta una
sola oportunidad para conseguirlo: volver a reunir a los integrantes de su antigua
banda de blues y organizar un
concierto. No obstante, hay dos inconvenientes: que los miembros del grupo
quieran reunirse nuevamente y que acepten la propuesta, no siempre confiable,
de Jack; y, por otro lado, es una época en la que el blues ya no es tan popular.
Los hermanos Blues y la Pingüino |
Los hermanos Blues consideran que es
una misión divina la que tienen por delante y, por eso, hacen de todo para
conseguir el dinero de forma legal, aunque la primera idea de Jack fue
conseguirlo de la forma que le resulta más fácil: robando; sin embargo, la “pingüino”, como él y su hermano le llama
a la monja que dirige el orfanato, los expulsa de forma violenta de su despacho,
decepcionada por la falta de escrúpulos de los hermanos. Entonces, ambos no
tienen otra alternativa: deben conseguir el dinero de forma honesta.
A pesar de sus buenas intenciones, los hermanos Blues no consiguen olvidarse
y dejar de lado sus costumbres “dudosas e inescrupulosas”; por tanto, cada acto
que ellos hacen provoca una consecuencia y a lo largo de la película vemos cómo
consiguen fácilmente ganarse enemigos y más enemigos que desean atraparlos,
cueste lo que cueste.
Y es justamente en este ambiente ambiguo –el objetivo de los hermanos
versus el objetivo de sus enemigos- que The Blues Brothers desarrolla al
máximo el humor, con muchas escenas de pura acción y otras, en el mejor estilo
flemático.
Los hermanos Blues |
El humor, la ironía, el sarcasmo están presentes desde la primera escena de
la película, cuando hay una imagen panorámica de la ciudad de Chicago. Pero es
una Chicago fea, poco atractiva: la imagen aérea muestra la zona industrial de
la ciudad cubierta de smoking. Se ven las fábricas con sus grandes chimeneas
contaminando la ciudad. Luego, viene un contraste de colores: en una imagen
aérea, se muestra una cárcel. Y parece hermosa si la comparamos con la primera
imagen de Chicago. Se ven diferentes grupos de prisioneros, uniformados,
caminando unos y haciendo ejercicios otros; también se ven las áreas verdes y
bien cuidadas de la prisión.
The Blues Brothers, 1980: Primera escena de Chicago |
The Blues Brothers, 1980: La cárcel |
The Blues Brothers, 1980: El orfanato. |
El contraste de las dos escenas es el inicio de la ironía que tiene su
momento más importante cuando Jack sale de la cárcel y descubre que su hermano
lo espero en un antiguo carro de patrulla que lo ha comprado en un remate de la
policía. Es en este carro, que aún mantiene los colores originales que lo
caracterizaban como patrullero, que los hermanos Blues vivirán su gran
aventura, enfrentándose a la ira de la policía, principalmente.
Antes de hablar de los enemigos de los hermanos Jack y Elwood, hay que
destacar dos elementos importantes que ayudan a contribuir el humor como una
especie de equilibrio entre la velocidad de las acciones y la parquedad de los
dos personajes a los que parece que nada los afecta.
El primer elemento es la ropa de los hermanos Blues. Durante toda la
película ellos estarán con la misma vestimenta: traje negro, gafas de sol y
sombrero. No se quitarán esta ropa un solo instante. Incluso ni para dormir en
la única escena en que se lo ve descansando. Siempre están con la misma ropa. Una
de las escenas que marca esta característica de los personajes es cuando el
hotel en que se están hospedando es derribado. Ellos se levantarán de los
escombras con la misma ropa y caminarán como si nada hubiera pasado.
Gafas oscuras, terno, sombrero: nunca pierden la compostura |
Una sola vez aparece Jack sin gafas |
En relación a las gafas de sol, en una sola oportunidad Jack se las quitará
por un instante.
Esta característica física de ambos hermanos hay que comprenderla para entender
el carácter de ellos: Jack y Elwood son genuinos y no les importa para nada lo
que los otros piensen de ellos. Sus ideas les obsesionan. Son testarudos y no
hay “normas” o “leyes” que les impida hacer lo que se han propuesto. A esto,
hay que añadir la falta de expresividad de sus rostros. Parecen inmutables y,
solo así es cómo se explica el hecho de que consigan lo que se han propuesto
hacer.
El segundo elemento que hay que mencionar es “la revelación” divina que los
hermanos Blues afirman tener. Apenas Jack sale de la prisión, ya hay una
insinuación fotográfica de esta “revelación”: cuando se abre el portón para que
Jack salga de la cárcel, la luz del sol lo ilumina por la espalda, creando una imagen
onírica; este mismo efecto se repetirá en Jack cuando ambos hermanos entran a
una iglesia para descubrir la “misión” que tienen que llevar a cabo.
Jack sale de la prisión |
La revelación |
Con canto, baile y coreografía Jack acepta "la revelación" |
En su recorrido para juntar a los integrantes del grupo y conseguir el
dinero, Jack y Elwood se enfrentan a cuatro grandes enemigos:
Primero, hay una mujer misteriosa que parece ser la exnovia de Jack,
interpretada por Carrie Fisher. Es una mujer guapa que desea matar a Jack desde
el primer instante. De ella no se sabe nada en las primeras escenas, a no ser
su obsesión por destruir a Jack y no dudará en usar bombas, misiles,
metralletas. Y es justamente, cuando esta mujer misteriosa consigue finamente
atraparle a Jack, que éste se quita las gafas, se arrodilla frente a la chica y
le suplica que no le mate con un discurso rico en ingenio y humor.
Carrie Fisher: la mujer misteriosa |
El ingenio y el humor le salvan a la vida a Jack |
El segundo enemigo de los hermanos Blues es la policía.
Dos policías deciden atrapar a los hermanos cueste lo que cueste después
que fueron engañados por ellos al escapar cuando los iban a detener. Como es
lógico, varias veces se darán las posibilidades de que esto suceda y una de las
más espectaculares en la película es la persecución dentro de un centro
comercial. Escenas velocísimas y escandalosas por la destrucción masiva que
provocan tanto los policías como los hermanos Blues. Es una de las mejores
escenas.
Persecución y destrucción de un centro comercial |
Un grupo de nazistas estadounidenses también forman parte del grupo selecto
de los enemigos de Jack y Elwood.
Los hermanos Blues parecen tener un solo principio moral: ellos mismos; por
tanto, no les incomoda en absoluto perjudicar a “los otros” cuando tienen que
defender sus intereses. Es de esta forma que ellos interrumpen una
manifestación política de los nazistas, lo que provoca la alegría del público
que repudia a este grupo y, al mismo tiempo, el odio y el juramente de los
nazistas de que acabarán con los hermanos.
Los hermanos Blues destruyen la manifestación de un grupo nazista |
Un conjunto de música country también es enemigo de los hermanos Blues al
haber sido engañados por ellos.
La secuencia más importante de los enfrentamientos de los hermanos Blues
con sus enemigos se da casi al final de la película. Después que ellos
consiguen organizar un show musical que les da el dinero necesario para pagar
los impuestos del orfanato, deben ir de madrugada del local del show que
organizaron a la ciudad de Chicago burlando la vigilancia intensa que les montó
la policía. Son diez minutos de persecución en la que intervienen, además de
los enemigos ya mencionados, la policía de Illinois, la de Chicago y hasta la
guarda nacional.
Diez minutos de persecución y cientos de extras |
Ejército, policía, bomberos... todos quieren atrapar a los hermanos Blues |
Es definitivamente la mejor escena de la película y hay que verla para
admirar la grandeza de su realización. Son centenas de extras que participan en
la persecución que se da a 160 sesenta kilómetros por hora. Aunque hubo efectos
especiales, hubo también muchas escenas de alto riesgo que salieron a la
perfección, como cuando los hermanos Blues van a 160 kilómetros –de verdad, sin
ningún tipo de truco- por las calles de Chicago. Además, cuando finalmente los
hermanos llegan al edificio donde está la oficina recaudadora de impuestos, la
acción llega a su máximo momento de expresión cuando llegan a la plaza camiones
con centenas de soldados de la guardia civil, helicópteros, decenas de
patrulleros, la policía montada, bomberos, etc. para atrapar a los hermanos
Blues.
Como es de esperarse, los hermanos consiguen su objetivo y pagan los impuestos
antes de ser atrapados; sin embargo, uno de los logros cómicos de esta escena
aparatosa, que significó el uso de centenas de extras y una precisión
milimétrica, es el contraste en la agitación y los gritos de guerra de la
policía y de la guardia nacional cuando llegan a la plaza, entran al edificio y
suben las escaleras, con la parsimonia de los hermanos al subir en el ascensor
después de haber violado todas las reglas y leyes posibles. Como hemos dicho,
es como si nada les pudiera afectar.
Gritos de guerra y mucha gente para atrapar a los hermanos Blues... |
La parsimonia de los hermanos Blues |
The Blues Brothers también tiene varias escenas musicales de excelente calidad y solo
queremos mencionar dos grandes momentos: la canción The Old Landmark interpretada por James Brown y el coro del reverendo James Cleveland, con una
coreografía magnífica y la fantástica presentación de Cabe Calloway, interpretando una composición suya de 1931: Minnie the Moocher.
Bellísima interpretación de Cabe Calloway del cásico "Minnie the Moocher" |
The Blues Brothers es una película que marcó una época y que fue hecha para entretener. Tuvo
mucho éxito y se originó en los personajes creados por John Belushi y Dan Aykroyd
de mucha popularidad en la televisión estadounidense. La película no inventa ni
formas narrativas ni secuencias que no hubieran sido hechas con anterioridad;
sin embargo, lo que se hizo fue hecho con precisión.
Texto original de Patricio
Miguel Trujillo Ortega.
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