O filme que assistimos...

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Patricio Miguel Trujillo Ortega


6 de outubro de 2013

Never Let Me Go - Nunca Me Abandones



Never Let Me Go - (Nunca me abandones), Drama – Ciencia Ficción - Romance, 103 minutos, 2010. Reino Unido.

Con: Carey Mulligan, Andrew Garfield, Keira Knightley.

Dirección: Mark Romanek.

Never Let Me GoNunca me Abandones – es una de las películas más conmovedoras que he visto este año. Esta película británica independiente trata con delicadeza y dureza, al mismo tiempo, la esencia del ser humano en un mundo en la que el individuo pierde cada día su valor como tal y su sentido de la vida para convertirse en una simple mercancía.

Nunca me Abandones no es una historia de amor y, peor aún, de un triángulo amoroso como, ridículamente, muchos la divulgan para venderla. Es la historia profunda de un grupo de niños que un día descubre que no son más que “mercancía” fabricada para ser desechada después de ser usada y, no tienen ninguna posibilidad de cuestionar ese “cruel” destino y, peor aún, de huir de él.
 
Kathy H: ahora no paso mi tiempo buscando un futuro...
“Ahora no paso mi tiempo buscando un futuro, sino recordando el pasado”

Kathy H. es una chica de 28 años. Ha llegado el momento en que dejará de ser “cuidadora” y, por tanto, su futuro ha terminado. Ahora debe cumplir el papel para que el que fue “creada” y lo único que le queda es contarnos su historia: volver a vivir el pasado, única manera de saber que tuvo una vida, “que tuvo un tiempo”. Su historia, dividida en tres momentos, está relacionada con las diferentes fases de los tres personajes principales: ella y sus dos amigos: Tommy y Ruth.

La película empieza en 1994, el año en que Kathy H. nos cuenta su historia. Nos dice sobre su papel de “cuidadora”, pero no entendemos lo que quiere decir con “cuidadora”. ¿Es una especie de enfermera? Este es el primer misterio, como otros que vendrán, con el cual es espectador tendrá que enfrentarse.

Inmediatamente la primera parte de la historia nos ubica en Hailsham, en 1978, en algún lugar de Inglaterra, en un internado para niños y niñas.
Kathy H y los alumnos de Hailsham
“No harán otra cosa más que vivir la vida que ya está establecida para ustedes”

Desde el primer momento, Hailsham aparece como un lugar misterioso. Parece ser un internado particular, pero enseguida hay la duda de si se trata de una institución pública para huérfanos. Sin embargo, lo que sí se nota desde el primer instante es el comportamiento poco “infantil” de los niños. A pesar de que se les ve jugando y corriendo, hay un ambiente “melancólico” en ese universo, tal vez transmitido por Kathy H, pues es a través de ella que conocemos la historia.

No obstante, hay una escena clave que le desconcierta al espectador que intenta descubrir qué lugar es Hailsham. Un día los niños están emocionados porque habrá una venta de objetos que han llegado a la escuela y que ellos los podrán comprar con “bonos” que han obtenido a lo largo de los meses. Pero los objetos que los niños “compran” son cosas usadas, viejas, inclusive rotas. A pesar del estado de los productos, los niños los admiran y los compran con entusiasmo, como si fuera la única oportunidad de tener algo tan bello.
 
Kathy y sus amigas observan a las profesoras que evalúan sus pinturas
¿Qué lugar es ese que se llama Hailsham en el que los estudiantes usan una pulsera magnética que la pasan por un sensor todos los días cuando bajan por las escaleras? ¿Por qué los muchachos toman siempre un vaso de leche con una medicación? ¿Qué historia secreta se esconde en ese lugar en el que hay una preocupación excesiva por la salud de los alumnos, en el que cualquier lastimado, por más sencillo que sea, merece la atención del médico?

Los principales personajes ya han sido presentados hasta ese momento: Kathy H es una niña introvertida y sensible. Ella tiene un amigo, Tommy, por quien se preocupe todo el tiempo, y de quien los demás se burlan. Además, Tommy tiene dificultades para expresar sus emociones, por lo que Kathy H intenta protegerlo.

El tercer personaje es Ruth, una niña que a pesar de que es amiga de Kathy H y de Tommy, parece que le desprecia a este último.

Conforme los minutos pasan, la “historia” que parecería que Kathy H nos iba a contar: la vida de ella y sus amigos y sus “típicas” historias infantiles en una institución educativa, nunca sucede. Lo que se ve es un comportamiento raro que confirma que Hailsham es un lugar enigmático, asustador. Por ejemplo, los alumnos piensan que el mundo exterior es peligroso y que solo ahí están protegidos. Ellos cuentan historias de otros muchachos que se atrevieron a cruzar la verja y desaparecieron.
 
Tommy frente a la verja: el temor al mundo externo
Con la llegada de una nueva profesora a la institución, el misterio se revela. Esta joven profesora decide contarles a los muchachos la verdad porque piensa que “es la única manera de que tengan vidas decentes”. Les dice que ellos nunca llegarán a ser adultos. Que hagan lo que hagan, “no harán otra cosa más que vivir la vida que ya está establecida para ellos”. Pues ellos son “clones”, seres fabricados para donar, cuando sean adultos, sus órganos vitales. Y una vez que hayan hecho las donaciones posibles, morirán.
 
La profesora les cuenta la verdad a los niños
Al oír esa verdad asustadora, se esperaría que los muchachos se rebelaran, que buscaran explicaciones y que intentaran, de alguna manera de escapar y de encontrar otra alternativa para sus vidas; sin embargo, la profesora desaparece y los alumnos permanecen en silencio, viviendo pasivamente; los meses se acumularán, los años llegarán y ellos crecen conformados con el destino que se les ha impuesto.

Desde que fueron creados, se los educó para que aceptaran esa realidad. Y ese es un hecho asustador, por más “ciencia ficción” que la película sea. Una sociedad que condiciona a que las personas se comporten bajo un esquema único con el solo objetivo de beneficiarse de ellas. Seres pasivos, sin capacidad de pensar; seres que niegan sus emociones, sus sueños y que no se atreven a cuestionar. Seres incapaces de percibir su condición humana.

“Nuestros modelos son basura”

La segunda parte de Never Let Me Go (Nunca me Abandones) sucede en 1985 y junta las piezas del rompecabezas y los misterios se aclaran.
 
Kathy H y sus amigos van a "The Cottages"
Kathy H y sus amigos han cumplido 18 años y salen de Hailsham por primera vez para ir a vivir en The Cottages, una granja en la que van a vivir con otros jóvenes que vienen de lugares semejantes al de Hailsham, aunque no de la misma categoría. En este lugar ellos tienen, finalmente, contacto con el mundo externo, pero aún son controlados con sus pulseras magnéticas.

Finalmente el espectador se entera que esos jóvenes forman parte del NDP (por sus siglas en inglés), un Programa Nacional de Donaciones. Es decir, Hailsham y todo lo que les hacen a los chicos es “legal”. Aquí se mezcla, entonces, la realidad con la ciencia ficción. Cobran sentido las palabras con la que empieza la película, antes inclusive de conocer a Kathy H, cuando se nos informa: “El gran avance en la medicina surgió en 1952. Los médicos podían curar aquello que hasta entonces era incurable. Hacia 1967 la expectativa de vida superó los 100 años”.
 
Never Let Me Go
Esta revelación transforma la película, que hasta ese momento tenía matices de “drama”, en una obra de “ciencia ficción” con un profundo sentido humano. La historia sucede en un 1985 que no corresponde a nuestra realidad, pero se la presenta como un hecho real. Es el pasado ficticio de una sociedad posible que crea clones para que donen sus “órganos” vitales, pues las personas están obsesionadas por vivir más tiempo, a cualquier precio. Parece que es una sociedad en la que se han roto valor de ética, de dignidad humana, más aún cuando nos preguntamos de dónde vienen esos clones y cómo los hacen.
Kathy busca en una revista a su "Original"


La segunda pregunta no tiene respuesta. La película no está preocupada en contar la “historia” del avance de la medicina y sus consecuencias; la primera pregunta tiene una respuesta parcial y obvia, “descubierta” por Ruth.
 
Los jovenes espían por la ventana el posible "Original" de Ruth
Un día, una pareja de donantes que viven en el Cottages le cuenta a Ruth que en un pueblo cercano han visto a una mujer que se parece a ella y que podría ser su Original, es decir, la mujer de la que hicieron. Ellos viajan un día al pueblo para verla y cuando la ven por la ventana de una agencia de viajes, se dan cuenta que es una mujer muy elegante y que no se parece en nada a Rut.
 
Los chicos no saben cómo comportarse en el mundo externo: lo simple es difícil para ellos
Surge, entonces, por primera vez la manifestación de un sentimiento de tristeza, de rabia, de frustración, pero no lo suficientemente fuerte como para romper esa pasividad con la que han sido creados y educados. De todas formas, las palabras de Ruth son explícitas para decirnos de dónde vienen los clones: “Nuestros modelos no son personas como ella. Todos lo sabemos, pero nunca lo decimos. Nuestros modelos son basura. Drogadictos, prostitutas, borrachos, vagabundos (...) Si quieres buscar Posibles... busca en la alcantarilla. De ahí venimos”.
Ruth le dice a Kathy: "Somos modelados con los de la escoria"
Esta declaración de Ruth es, en verdad, un cuestionamiento a la posible actitud, y quien sabe, en muchos lugares, a situaciones reales, de considerar al ser humano como un individuo descartable. Hay grupos sociales que piensan que hay personas que no valen nada y que si se los elimina, no se pierde nada.

Es un cuestionamiento serio de un posible futuro en la que el “individuo” se transforme en una “mercancía” negociable para beneficio de otros individuos. No hablamos de la esclavitud, esa lacra social que ha dominado a la humanidad durante siglos, sino a esa obsesión morbosa de la actual sociedad de valorar su “eternidad”, sin ética, sin valores de respeto por la condición humana.

A pesar de este sentimiento de frustración total, surge en Cottages una esperanza: esa misma pareja les cuentan a los tres amigos que hay oído hablar que si una pareja siente un “amor verdadero”, si lo solicitan, pueden conseguir aplazar la donación de órganos dos o tres años más.

Empiezan a parecer señales de que esos jóvenes quieren tener la oportunidad de vivir: de vivir su vida; pero, lamentablemente, ellos están solos y condicionados a hacer lo que les han dicho que deben hacer.

“Se suponía que no debían sentir”

El tiempo pasa y los tres amigos se separan. Ruth le deja a Tommy y Kathy H obtiene el papel de “cuidadora”. Los cuidadores son clones que asisten a los donantes hasta que realizan su última donación, por tanto, hasta su muerte. Kathy cumple su función y se siente orgullosa de hacerlo, a pesar de que sabe que es un actividad desgastante.
Never Let Me Go: seres creados para "dar" vida a otros. Una de las asistentes de Kathy después de haber donado un ojo

Así, en 1994, cuando ya trabaja como “cuidadora” a unos 9 años, se encuentra nuevamente con Ruth. Su amiga de la infancia ya ha hecho dos donaciones y ya no quiere sobrevivir a la tercera donación. Está cansada y confiesa que no le gusta la idea de que un día, simplemente, le desconecten.
 
Ruth y Kathy H: "Supongo que me veo mal", dice Ruth después de haber hecho varias donaciones
Y es realmente una de las escenas más impactantes de la película cuando se realiza la última donación de Ruth. Ella está tendida en una cama metálica de hospital, le quitan sus últimos órganos, apagan los aparatos y ella se queda ahí, como lo que es: un cuerpo inerte que ha cumplido su función: dar sus órganos para que otras puedan vivir.
 
El momento en que le quitan el último órgano que Ruth puede donar
Ruth está muerta, sola, abandona: una persona a la que le quitaron la dignidad humana

Ella nunca fue considerada un ser humano. A su alrededor solo hay silencio, soledad, abandono total y la frialdad a la que no le importan esas personas que “nunca debían sentir nada”

Sabemos entonces lo que les espera a todos los clones.

Pero antes de su muerte, ella, Kathy H y Tommy se vuelven a encontrar después de muchos años y hacen un paseo a una playa donde hay un barco encallado. Es una de las escenas más bonitas y tristes de la película. Bellas por los colores poéticos de la imagen y triste porque los tres amigos están ahí, juntos, pero solos. No tienen ninguna esperanza en vida. El barco encallado es un símbolo de sus propias vidas: nacieron encallados y nunca saldrán al mundo, a recorrerlo, para conocerlo y para vivirlo. Están pardos ahí, hasta que alguien se los lleva.
Tommy corre al bote que está encallado
Surge entonces la idea de verificar si es verdad aquella historia que habían escuchado algunos años antes sobre el “amor verdadero”. Tommy y Kathy van a la casa de Madame, una profesora de Hailsham, para contarle que ellos se aman de verdad. Quieren que ella les ayude para que puedan vivir dos o tres años más. Esta es otra de las escenas que muestran ese mundo frío y deshumano de una sociedad en la que dignidad humana no existe. O mejor dicho, solo existe para unos cuantos “seleccionados”.
Tommy y Kathy frente a la casa de Madame: la última posibilidad de "vivir" un poco más
Tommy siempre tuvo dificultad de mostrar sus emociones cuando era niño, principalmente cuando tenía que dibujar. Cuando creció, se esforzó por aprender a expresar sus emociones por medio del dibujo y, como es ingenuo, así como Kathy, pues a pesar de que son adultos su experiencia de vida es tan limitada, va con su amiga a la casa de Madame para que ella verifique que ellos tienen el amor verdadero. Sin embargo, la profesora les explica que eso no existe y que los dibujos, que ellos hacían cuando eran niños en Hailsham y que se los llevaban a la galería, eran para “probar que los niños donantes eran humanos”. Después de todo, se suponía que ellos “no debían sentir”.
Tommy grita desesperadamente al perder la última esperanza
De esta forma el ciclo de la vida de Tommy y Kathy H está terminado. Ruth ya ha hecho su última donación y no existe más. Tommy se prepara para sus últimas donaciones y Kathy H en breve dejará de ser “cuidadora” e iniciará sus donaciones. No obstante, sus últimas palabras resumen el sentir de ellos: “Quizá ninguno de nosotros comprenda lo que ha vivido o sienta que ha tenido suficiente tiempo”.
Ruth mira a Tommy cuando le preparan para hacer una donación más: "Quizás ninguno de nosotros comprenda lo que ha vivido o sienta que ha tenido suficiente tiempo"

El amor verdadero.

Aunque hemos discursado el tema de los donantes a lo largo de este texto, no podemos olvidarnos que el título de la película se refiere al “amor verdadero” de Kathy H por Tommy, pues la verdad es que Never Let Me Go es también una triste historia de amor de una niña, que luego será adulta, y que nunca se olvidará de su único amor. Y como único consuelo le queda es la cinta casete que Tommy le compró cuando eran niños y escucha impotentemente la canción “Never Let Me Go” interpretada por Jane Monheit.
Kathy escucha la canción "Never Let me Go"
Últimas palabras.

Never Let Me Go es una película que lanza, indirectamente, un cuestionamiento serio sobre la “evolución” del ser humano y las consecuencias de esta evolución si no hay una actitud ética de respeto a la dignidad humana. Y este planteamiento se lo presenta sin moralismos ni sensacionalismos.

La película tiene una fotografía bellísima y merecidamente ganó seis premios en diversos festivales cinematográficos internacionales y fue nominado para 22, según información del IMDb.

Texto original de Patricio Miguel Trujillo Ortega.

Prohibida la reproducción total o parcial del texto sin la autorización escrita del autor.

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