Disobedience (Desobediencia)

Disobedience (Desobediencia). Drama. Lesbianismo. 114 minutos. 2017. Reino Unido – Irlanda.

Con Rachel Weisz, Rachel McAdams, Alessandro Nivola y Anton Lesser.

Dirección de Sebastián Lelio.

Tener la libertad de escoger.-

Desobediencia, dirigida por el chileno Sebastián Lelio, está basada en la novela, del mismo nombre, de Naomi Alderman. Uno de los comentarios más comunes que se hizo antes de su estreno, se refería a que los dos personajes principales de la historia eran dos mujeres lesbianas; por tanto, la primera impresión que tuvimos fue que estaríamos frente a otra buena película de temática lésbica.

Sin embargo, después de ver la película, el espectador se da cuenta de que, a pesar de que hay una historia positiva de amor entre dos mujeres lesbianas, ése no es el tema central de Desobediencia. El amor de las dos lesbianas es solo el puntapié inicial para tratar de un tema delicado y extremamente más profundo, a saber: la libertad que debe tener un individuo, sea cual sea, para elegir qué hacer con su propia vida. Esa libertad que se aplica a todos los aspectos de la vida.

Por eso, al terminar de ver el filme, uno se pregunta: “¿Qué podemos decir sobre la ‘libertad de elección’?” “¿Hasta qué punto las personas que viven en determinadas sociedades tienen, realmente, la posibilidad de decir y decidir lo que quieren hacer con sus vidas?”

Desobediencia

Por increíble que les parezca a muchos ingenuos, en nuestro mundo “occidental” hay grupos sociales en los que sus integrantes no tienen la libertad de decir “yo quiero esto para mi vida”. Estos grupos, en general, se mantienen cerrados al mundo por la idea arraigada con fuerza de que hay que seguir las tradiciones, como única forma posible de vida. En otras palabras, se plantea como mandamiento de vida la prohibición o, dicho de otra manera, la castración permanente que se hace a los integrantes de dichos grupos para que no puedan cuestionar esas tradiciones que, los defensores de ellas, las sostienen como pilares de sus “sociedades” para imponer sus ideas por medio de una educación basada en el miedo y la autorrepresión.

Quien ve esa realidad desde afuera, la observa pasmado, pues es obvio que uno se dice: “¿Por qué hacen eso? ¿Por qué no se rebelan contra eso?”. Hablar desde afuera, es muy fácil. Quién está dentro del grupo, muchas veces no percibe lo que sucede a su alrededor y acepta lo que le pasa porque creció de esa manera. El luchar por esa libertad no es fácil.

Desobediencia

Desobediencia es una excelente película compleja, bien hecha, con un buen guion y personajes bien definidos, que nos provoca estas y otras ideas. Hay que verla más de una vez para aprovechar al máximo su contenido para poder desarrollar una conciencia crítica de lo bueno y de lo malo de las tradiciones.

La historia.-

Desobediencia, interpretadas de manera excelente por Rachel Weisz y Rachel McAdams, es la historia de dos mujeres de, más o menos treinta años de edad, que viven dos mundos diferentes y que, por las propias circunstancias de la vida, deben decidir qué hacer para vivir en plenitud. Cada una de ellas tiene que dar un gran paso, cueste lo que cueste, si quieren sentirse plenas.

Ronit (Rachel Weisz) vive en los Estados Unidos. Es hija de un rabino inglés judío ortodoxo muy importante en su comunidad de Londres. Un día, recibe la noticia de que su padre ha fallecido y ella decide regresar a Londres para participar en el entierro de éste.

Desobediencia: Ronit

Al llegar a Londres, Ronit no es bien recibida por su comunidad, pues ella se fue a Estados Unidos rechazando todo lo que significaba la comunidad ortodoxa represora a la que pertenecía: se cambió de nombre, vive como una mujer independiente, se dedica a la fotografía; además de todo, no se ha casado y no tiene hijos. Pero, sobre toda las cosas, ella se fue de su comunidad rompiendo las relaciones con su padre, el rabino más respetado.

Ronit sabe que, para su comunidad, ella no cumplió con los mandamientos de su religión y de su padre; está consciente de que a ella no la aceptan por haber tomado las decisiones que tomó. A pesar de eso, quiere despedirse de su padre muerto. Tiene la necesidad de enterrar su pasado para poder continuar siguiendo adelante, sin arrepentimientos ni remordimientos, con relación a su padre y no sobre las decisiones que ella tomó en su vida, pues Ronit es una mujer que sabe lo quiere.

Desobediencia: Dovid y Ronit

En Londres, a pesar de las miradas frías y desconfiadas de los integrantes de la comunidad judía ortodoxa, ella se hospeda en la casa de Dovid (Alessandro Nivola), un amigo de ella de su época de infancia y el discípulo más querido del rabino.

Dovid está casado con Esti (Rachel McAdams), también amiga de la infancia de Ronit. Ambas se amaron en su adolescencia y tuvieron un romance secreto y prohibido, hasta que el padre de Ronit las descubrió.

Al mismo tiempo, Esti vive un conflicto intenso, pues ella nunca olvidó a Ronit y aún la ama; por eso, ella le llamó por teléfono a los Estados Unidos para darle la noticia del fallecimiento de su padre; caso contrario, Ronit no se hubiera enterado del suceso.

Desobediencia: Ronit visita la tumba de su padre

Ambas amigas reatan su vieja amistad y resurge la pasión que ni el tiempo ni la distancia consiguió destruir; no obstante, Esti vive un conflicto grande entre su deseo por Ronit y la obediencia que debe tener por las normas tradicionales de su comunidad, en las que la mujer ocupa un papel secundario en la sociedad, acatando lo que el marido establece en la casa y cumpliendo al pie de la letra lo que la religión manda.

Este conflicto crece a medida en que pasan los días y se aproxima la ceremonia en homenaje al rabino Krushka. Ronit lucha por su espacio, evitando entrar en conflicto con la comunidad que la rechaza abiertamente, que la observa con desconfianza y que no desean su participación durante la ceremonia en la sinagoga. Al mismo tiempo, su amor por Esti se intensifica; pero, no se deja llevar por la simple pasión de antaño, después de todo, ambas ahora son adultas. Han crecido y han madurado. Al mismo tiempo, el problema de Esti no es el amor tiene por Ronit, pues la ama y se siente satisfecha con ese amor; su problema es que empieza a darse cuenta que ya no quiere vivir más bajo la obediencia ciega de las tradiciones.

Los personajes y sus conflictos.-

Cuatro son los protagonistas de la película: Ronit, Esti, Dovid y el rabino Krushka. Éste último, a pesar de que muere al principio de la película, tiene poder y autoridad sobre la comunidad, aún después de su muerte; por tanto, aunque haya fallecido, sus principios no han perdido vigencia y sus decisiones siguen teniendo el mismo peso, como si estuviera vivo. En otras palabras, el rabino Krushka está presente en cada acto que sucede dentro de la comunidad ortodoxa, lo que es fundamental entender para comprender cómo los personajes de Desobediencia se relacionan entre sí y cuáles son las decisiones que cada uno toma.

Desobediencia

Empecemos hablando del rabino Krushka. Él fallece frene a su comunidad, dentro de la sinagoga, mientras habla sobre la creación del mundo y las criaturas que Dios creó. De los tres tipos de criaturas que Dios creó (ángeles, bestias y humanos), según él, solo el hombre tiene voluntad propia y la posibilidad de tener libertad de elección. También afirma que solo los hombres y las mujeres poseen el poder de la desobediencia.

De las palabras del rabino, vale resaltar la palabra “posibilidad”. Él no afirma que el ser humano tenga la libertad de elección; él asevera que el ser humano tiene esa posibilidad. Debido a que él muere enseguida, no es posible saber cómo continuaría su sermón; no obstante, esas son las palabras que determinan el comportamiento de cada uno de los personajes, en el sentido de que el rabino Krushka se otorgó en vida la capacidad de permitir o no que los demás tuvieran la posibilidad de elección; ya que, en la práctica, él no lo permitió ni con Ronit ni con Esti.

Desobediencia

Ronit, como lo dijimos al principio, vive en Estados Unidos. Ella se distanció de su padre para vivir su vida. Ella es lesbiana y, como se descubrirá a lo largo de la película, su padre nunca aceptó la sexualidad de su hija. Él la rechazó; por tanto, Ronit sigue su propio sendero; pero, con la muerte de su padre, tiene la necesidad de reconciliarse con él; no porque quiera el perdón de su padre, ya que Ronit es una mujer hecha y derecha, sabe lo que quiere y sabe lo que es: una mujer realizada. Ronit quiere terminar un capítulo de su vida para sentirse libre de ese pasado asfixiante.

Ella es una mujer decidida, fuerte, que no le teme a la comunidad a la que un día perteneció. Aunque sabe que la han rechazado, ella regresa sabiendo que su presencia es un desafío a todos. Al sentirse rechazada por su tío, ella no se desespera ni cae en llantos; al contrario, cuando es necesario, se enfrenta a él con calma. No se lamenta, por ejemplo, al saber que su padre ha deja de herencia a la sinagoga la casa de la familia. Ella se da cuenta que su padre murió sin perdonarla; mas, esto no significa que ella vaya a amargarse. Después de todo, su vida ya no está en esa comunidad.

Dovid y Esti

Sin embargo, el conflicto que Ronit tiene por delante es cuando se da cuenta que aún ama a Esti. El amor que tiene por su antigua novia es genuino, solo que, al mismo tiempo, con la madurez, percibe que no se puede quedar atrapada en el pasado. Ella se libertó de las reglas rígidas de la comunidad; por tanto, no quiere que Esti se vea obligada a quedarse atada a ese o a cualquier otro pasado; por eso, comprende que cada uno debe seguir su propio camino.

Esti es profesora de una escuela de primaria y, a diferencia de Ronit, se ha conformado con lo que los otros han decidido para su vida. A ella le gustaría vivir una vida plena, pero no sabe cómo hacerlo. Por un lado, está consciente de que no se siente realizada como mujer. Ella cumple con todas las obligaciones y reglas que manda su religión, por ejemplo: usa siempre una peluca, como tienen que hacer las mujeres para taparse la cabeza; tiene relaciones sexuales con su esposo todos los viernes, porque así mandan las reglas.  Pero, por otro lado, ella no solo que aún ama a Ronit, aunque no se trata del amor pasional de su juventud; sino de lo que Ronit significó en su vida: Esti está casada con un hombre, pero ella es lesbiana. Cuando se reencuentra con su amiga, le dice que nunca la olvidó y que no hubo otra mujer en su vida. Inclusive, le dice que el rabino pensó que el matrimonio “le curaría” (la homosexualidad).

Desobediencia: Dovid y Esti

El fallecimiento del padre de Ronit, para Esti es un pretexto para libertarse. De esta manera, tiene la posibilidad de reencontrarse con la única persona que la comprendió, no necesariamente para vivir con ella, sino por lo que su amiga representa: la posibilidad de elegir lo que ella quiere para su vida, pues Esti, a pesar de que está rodeada de un marido dedicado y de una comunidad que sabe todo lo que sucede a su alrededor, está sola: además de no tener el amor que ella necesita, no se tiene a sí misma. Está castrada, frustrada. Es una mujer que corre el riesgo de caminar hacia la amargura.

Dovid, el esposo de Esti, amigo de la infancia de Ronit y fiel discípulo-heredero del rabino, se ve obligado a cargar el peso de la culpa de los demás y a luchar contra la decisión de romper o no sus principios. Cuando Ronit llega, Dovid la recibe en su casa, primero con una recepción fría e incómoda, en la que la hostilidad está latente. No se siente bien con la presencia de su amiga. Aunque no se menciona nada explícito, a lo largo de la película se da entender que él conoce el pasado que hubo entre ella y su esposa. A pesar de eso, permite que su amiga se hospede en el seno de su hogar.

Dovid en la sinagoga

Pero Dovid se ve obligado a enfrentarse contra lo más sagrado de sus creencias. Esti, al saber que está embarazada, no quiere que su hijo/a tenga que vivir como ella. Quiere que su hijo/a tenga la libertad de escoger lo que sea mejor para sus vidas. Dovid se ve obligado a tener que tomar una decisión nada fácil para quien va a ocupar el máximo cargo de la comunidad judía ortodoxa  la que pertenece: le da o no la libertad que su esposa le pide (divorcio).

Escenas especiales.-

Una de las escenas más importantes de la película es con la que inicia la historia. El rabino Krushka está en la sinagoga hablando a su congregación sobre los principios básicos de las creencias de ellos. Discursa sobre la creación del mundo y cómo Dios creó tres tipos de criaturas. Este discurso, largo y pausado, es dicho con pasión y convicción; en medio de él, el rabino tiene un ataque y muere frente a su comunidad. La escena es fundamental porque la “obediencia” y “la desobediencia” son los ejes de la historia.

Desobediencia

Esta escena es fundamental para entender la película, pues desde el inicio se plantea el conflicto de los personajes con la filosofía que se predica dentro de la comunidad, ya que el rabino habla de la “posibilidad de tener la libertad de elección”; sin embargo, cuando Ronit optó por esa opción, tanto su padre como su comunidad la rechazaron.

Otra escena importante es cuando Esti le pide a su esposo que le dé la libertad. En ese momento de la historia, ya está claro que Ronit y Esti no van a quedarse justo. Sería algo demasiado obvio y forzado. La escena es fundamental porque es el cierre del discurso inicial del rabino al comienzo de la película.

Los encuentros clandestinos y amorosos entre Esti y Ronit son escenas claves porque son los únicos momentos, durante la película, en los que ellas pueden ser ellas mismas: con sus pasiones, con sus verdaderas identidades, con sus secretos. Estas escenas son retratadas con belleza, con pasión, con sensualidad.

Ronit en la casa de su tío

Hay una cuarta escena que nos parece importante: Ronit visita a su tío en la fábrica de pelucas que él fabrica. Él le entrega las llaves de la casa que fue de la familia de Ronit y le dice que puede llevarse las cosas que son de ella. Lo demás tiene que quedarse, pues el rabino dejó de herencia la casa para la sinagoga. La escena es clave para entender la frialdad del gesto, no tanto del rabino, sino de la propia familia de Ronit que la rechaza y la mira con desdén.

Sobre la película.-

Desobediencia es una película lenta, pero no es parada. La lentitud está bien pensada porque, gracias a ella, los protagonistas están bien caracterizados; incluso los personajes secundarios. Además, esta “lentitud” sirve para profundizar el ambiente que les rodea Ronit y Esti, lo que es fundamental para que el espectador comprenda, de alguna manera, cómo funciona una comunidad ortodoxa, sin caer en los prejuicios basados en la ignorancia del público sobre esa sociedad.

Desobediencia: Esti sigue todas las tradiciones que le han impuesto

De esta manera, la transición entre un escenario y otro enriquece la historia. No hay nada que esté suelto, lanzado al acaso.

Desobediencia es una película delicada, no solo por el tema que trata, sino por la forma que lo hace al colocar frente a frente dos situaciones extremas, a saber: la necesidad de reconciliación con el pasado de Ronit, y la dureza y falta de perdón del rabino Krushka y sus seguidores. La película también es sensible al mostrar no solo el amor entre Ronit y Esti, sino también los conflictos de Dovid al tener que abrir mano de sus principios cuando Esti le exige la libertad de elección.

Desobediencia: Ronit, Esti y Dovid

Desobediencia, como dijimos al principio, es una película a la que hay que verla varias veces. Es una excelente obra en todo sentido.

Texto original de Patricio M. Trujillo O.

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