Con Vahina Giocante, Mohammed Khouas.
Dirección de Ziad Doueiri.
Lila Dit Ça (Lila dice) es la historia de una joven que juega entre la inocencia y el deseo
sexual; entre la fantasía y la provocación, sin llegar a percatarse de que hay
un límite entre la imaginación y la realidad. Es la historia de una joven que
está en “una” búsqueda y se atreve a
jugar con las palabras al encontrar un “oyente”
que se deja seducir porque, con solo la presencia de ella, su mundo se queda al
revés.
Lila dice es una
película profunda, sensible y sensual que trata sobre todo del despertar sexual
de los jóvenes, pero sin dejar de lado otros temas contemporáneos importantes:
los inmigrantes árabes en Francia, el racismo, el prejuicio social y sexual, la
violencia y las aspiraciones en la vida.
Frente a tanta complejidad temática, Ziad Doueiri
consigue hacer una muy buena película, ágil, con personajes hondos y realistas;
evita, en la medida de lo posible, los estereotipos, no solo en la
caracterización de los personajes, sino, principalmente, en la manera en que se
expresa Lila, pues todo lo que ella dice es provocante y explícito, pero no
vulgar. Algo que parece contradictorio, pero no llega a serlo debido a que el
director consigue hacer “lírica” con la dinámica de las imágenes, los ángulos,
la variedad de planos fotográficos (prevaleciendo los primeros planos), el
movimiento constante de la cámara y, fundamentalmente, con las actitudes
provocadoras de la protagonista, que sabe que su mirada es mucho más profunda
que sus palabras.
Lila dice... narrada en primera persona |
Del ambiente y los elementos.-
La historia de Lila dice, narrada en primera
persona por Chimo, transcurre en un barrio pobre de la ciudad de Marsella,
donde se han establecido los inmigrantes árabes y, a través de las palabras del
narrador, un joven de origen magrebí, conocemos algunas características de sus
habitantes. Sin embargo, hay que recordar que se trata de la visión que él
tiene, por lo que la historia es “parcial” e intimista, tanto del lugar como de
los personajes. Chimo decide contarnos lo que Lila “dice”, de manera objetiva,
sin interpretaciones extras, , pues finalmente está decidido a dar un paso
importante para cambiar su estilo de vida y, para hacerlo, necesita hacer una
especie de “examen de conciencia”, para purgar sus “elecciones equivocadas” y
poder caminar hacia adelante.
Lila dice... El barrio donde vive Chimo |
Lila dice... Chimo |
Hay tres elementos que se establecen desde el
principio de la película y que no pueden ser ignorados. Estos son: la
criminalidad, el racismo y los inmigrantes. Sobre estos últimos, se menciona
principalmente el hecho de que “ahora” todos los árabes pueden ser considerados
terroristas. Chino no lo dice con esas palabras textuales, pero lo insinúa
cuando se ve cómo la policía detiene, en el barrio donde él vive, a un grupo de
personas, y se menciona que después del “ataque” (2001), todos pagan la culpa. Esta
idea se la acentúa con el gesto de amenaza que les hace un policía, de que
ellos pueden ser los próximos a ser detenidos, porque él y sus amigos reclaman
de lo que ven.
La policía deteniendo a un grupo de "sospechosos" |
Chimo y sus amigos |
Sobre la criminalidad: Chimo tiene un grupo de tres
amigos, liderados por Mouloud. Ellos roban diversos establecimientos
comerciales sin ningún escrúpulo y Mouland vende la mercancía, pero sin
compartir los lucros con sus amigos, quienes le siguen ciegamente, sin oponérsele
de ninguna manera. Él dice que sus amigos no tienen ningún futuro en la vida y
ya se han conformado con vivir de una manera mediocre. Ellos no quieren
esforzarse para salir de esa situación. Ni siquiera el propio Chimo, que tiene
la posibilidad de irse a París para estudiar con el apoyo de una de sus
profesoras que percibe que él tiene un gran potencial como escritor, se
esfuerza por cambiar “su destino”. Él y sus amigos son personas pasivas y,
aunque él no está satisfecho con su mediocridad, no hacen nada para cambiar el
estado de las cosas.
Lila |
Y el último tema establecido desde el principio es el
racismo, que se lo muestra desde tres ángulos. Primero, a través de las
actitudes de la madre de Chimo, pues su esposo la ha abandonado para irse a
vivir con una “francesa rubia”. El segundo, que nos llevará al clímax en la
película, es la actitud agresiva, violenta, casi salvaje, por parte de Mouloud
contra Lila, pues él quiere estar con ella, aunque sea a la fuerza, pero Lila,
una chica rubia, de ojos claros azules, que dice que tiene “una cara de ángel” ni siquiera le dirige
la palabra. Y Lila también forma parte de ese racismo, como el tercer elemento,
pues ella misma dice que se considera “tan rubia que parece una mancha, como un
Ferrari en medio de la chatarra”. Es
así como ella se ve en ese barrio. Y lo peor de todo, es que lo dice,
aparentemente, con un aire de ingenuidad tan grande, que Chimo se queda sin
palabras cuando la escucha.
De la historia y los personajes.-
Lila es una joven muy guapa, blanca, que vive en el
mismo barrio de Chimo con una tía, una mujer que muchos la consideran loca y
que tiene una serie de hábitos raros. Además de ser “devota”, con cierto
fanatismo, expresado a través de las imágenes religiosas que tiene en su
departamento, tiene un comportamiento inaudito: le gusta ver el órgano sexual
de su sobrina y desea tocarlo. Hay una escena interesante para reforzar el
sentimiento de la tía: un día, ella ve a Chino desde lejos y lo mira en
silencio, pero con odio, pues sabe que hay algo entre ella y Lila.
La tía de Lila quiere tocar el sexto de su sobrina |
Lila y su tía |
Chimo es un joven de diecinueve años que vive con su
madre, estudia en el colegio y está rodeado de malas compañías. Es tímido,
ensimismado y no confía en que pueda haber un futuro mejor para él y su gente.
Lila |
Un día, sin más preámbulos, Lila se acerca a Chimo y
le pregunta si quiere ver su sexo. Lo dice de una manera casi angelical, pero
provocadora y segura de lo que está haciendo; y, cuando el muchacho se queda
mudo, sin saber cómo reaccionar, ella percibe que lo puede manipular con las
palabras y los gestos, pues Chimo se queda en una encrucijada: quiere ver el
sexo y, al mismo tiempo, quiere descubrir qué es lo que realmente Lila desea
con él. Por eso, la muchacha le repetirá varias veces: “¿quieres ver mi sexo?”; y él solo se atreve a responder con gestos.
Lila |
Desde el primer instante, Chimo, un muchacho pasivo, se deja seducir por Lila, quien constantemente le provoca con expresiones similares a las dichas anteriormente; no obstante, el lenguaje de ella no llega a ser vulgar por la manera en que lo dice y la reacción o, mejor dicho, la no-reacción de Chimo. Además, a Chimo le surge una duda que le acompañará durante toda la historia: ¿por qué ella está interesada en él?
La primera impresión que el espectador tiene sobre Lila
dice es que podría tratarse de una película que va a explorar la
temática sexual de Lila; sin embargo, en seguida la obra camina por otros
rumbos, en los que aparecen los temas mencionados anteriormente. Pero eso sí:
el punto de partida y de llegada es y
será la aproximación de Lila a Chimo; no obstante, es difícil definir el tipo
de amistad que surge entre ellos; más aún cuando Mouloud, de manera grosera,
machista, vulgar y violenta, intenta tener algo con Lila y Chimo no se atreve a
decir que él es amigo de la muchacha.
Chimo, Lila y Mouloud |
De esta forma, la historia se abre en dos vertientes.
La primera es la relación de Lila y Chimo. En cada encuentro, ella le sorprende
al muchacho con algún tipo de revelación, principalmente dando a entender que
es una mujer con una gran experiencia sexual. Llega incluso a desafiarlo
–provocarlo, en verdad- preguntándole si le gustaría filmarla a ella teniendo
relaciones sexuales con otra persona. Y después de cada conversación, Chimo
percibe que él está en las manos de Lila. Ella hace y deshace la amistad con
provocaciones, frente a las cuales él no tiene ninguna respuesta.
Y la otra vertiente en la obsesión de Mouloud por Lila.
Cuando el joven líder de la pequeña patota percibe que no tiene ninguna chance
real de aproximarse a Lila, empieza el ataque verbal para denigrar su imagen,
lo que coloca en riesgo la propia relación de Mouloud con Chimo. Este
conflicto, Chimo lo vive con intensidad, pero siempre con miedo y de manera
pasiva, mientras que la propia Lila parece ignorarlo, a pesar de que ella está
consciente de que no se “encaja” en el barrio donde vive. No se sabe si ella se
da cuenta o no de que cada día que pasa ella corre algún tipo de peligro, no tanto por lo que le
dice a Chimo y lo escandaloso que esto pueda parecer, sino por la actitud
racista, dominante y vengativa de Mouloud en relación a ella.
Uno de los aspectos que hay que volver a mencionar conforme
la película avanza, es la pregunta constante que Chimo se hace: “¿por qué yo?”.
¿Por qué Lila se ha fijado en él? ¿Qué es lo que le atrae de Chimo, si él tiene
dificultades para expresarse? (Tal vez ese sea justamente el motivo: ella
necesita tener el control de la situación, algo que jamás ocurriría con Mouloud
o los otros amigos de Chimo.). Más aún si consideramos el hecho de que él,
además de no decir nada cuando está frente a ella, no consigue no reaccionar de
manera independiente: acaba pensando lo que Lila quiere que él piense.
Lila |
Podemos intentar acercanos a la respuesta de Chimo preguntándonos
quién es Lila ¿Por qué hace lo que hace?
Al finalizar la película, el espectador no tiene las
respuestas completas y, por medio de los descubrimientos que Chimo hará sobre
su amiga, solo nos queda la sensación de que Lila es una joven que está
buscándose mientras está en un mundo al que no pertenece. Ella sabe que es
bella y que los hombres –y las mujeres, como su tía- la admiran y la desean. A
pesar de que aparenta una sensualidad precoz, la mejor manera de describirla es
afirmando que es una joven inocente que juega con las fantasías, sin tabúes,
sabiendo que tiene el poder sobre los hombres. Un juego peligroso que se descontrola
al inventar una historia para castigarle a su tía: le dice que ha tenido relaciones
sexuales con el diablo.
Chimo y Lila |
Al final, hay una sensación vacía porque no sabemos quién
realmente es Lila. Ni el espectador ni Chimo sabrán la verdad y lo único que
sobra son las historias que Lila contaba y tenía, a partir de lo que cada uno
construirá su propia historia.
Escenas especiales.-
La primera escena especial que hay que comentar sucede
al principio de la película. Lila insiste en saber si Chimo quiere ver o no su
sexo. Y cuando el joven acepta la propuesta, ella se sienta en un columpio y
empieza a moverse levantando las piernas y dejando que el viento mueva su
falda. La cámara tiene dos posiciones. Una, estratégicamente, está colocada
atrás del columpio, de tal forma, que la escena, a pesar de ser picante, pierde
ese matiz y gana un aire de misterio, principalmente cuando prevalecen los
primeros planos del rostro de Chimo. La segunda cámara, está cerca de Chimo y
esta es mueve al ritmo del columpio, como si ella misma fuera un columpio que
se acerca y se aleja del objeto deseado. El espectador no solo ve el
movimiento, sino que lo siente.
Lila dice |
Lila dice |
Lila dice |
Lila dice |
De manera general podemos decir que la posición de la
cámara cumple un papel importante en Lila dice para transmitir las
sensaciones de los protagonistas. Cada escena está bien pensada. Se percibe que
nada fue hecho de manera aleatoria. Así podemos mencionar también la escena en
la que la profesora de Chimo va a la casa de este y conversa con él y su madre
para decirle que el muchacho tiene una gran oportunidad de estudiar en París,
lo que cambiaría para siempre su destino. Durante la mayor parte del diálogo,
la cámara siempre enfoca, en primer plano, o el rostro de Chimo, o el de su
madre o el de la profesora, de tal manera, que cada palabra y gesto tiene un
significado especial. La escena se construye, más que con las palabras, con las
expresiones de los rostros.
Lila dice |
Lila dice |
Sin embargo, una de las escenas mejor logradas y más
comentada de Lila dice, en la que director demuestra que tiene un dominio
total sobre la película, es la secuencia en que Chimo y Lila montan una
bicicleta. Ellos andan por las calles desiertas de la ciudad, después por el
puerto, pasando por depósitos y grúas, con el viento en el rostro de Lila, mientras
ella le seduce explícitamente a Chimo. La secuencia es demorada y la cámara
consigue acompañar el ritmo real de la bicicleta y de cada uno de los
movimientos de los actores, de tal manera que la escena, en lugar de parecer
algo vulgar, se transforma en algo mucho más que erótico o sensual: algo
idílico.
Fotografía.-
La presentación de Lila, en su primera aparición, se
da a través de una serie de primeros planos, mientras ella mira y habla a la
cámara, que es inquieta y se aproxima más hasta conseguir un primerísimo plano
de ella o, mejor dicho, de sus ojos y su boca. Este juego de imágenes es
fundamental para la construcción de este personaje: enigmático, provocador,
inverosímil, deseado y, al mismo tiempo, distante e intocable. Esta primera
escena ya nos muestra que nos encontramos frente a un director que sabe el
efecto que desea conseguir con su trabajo.
¿Quién es, realmente, Lila? |
Y lo confirmamos cuando descubrimos que Lila
dice no muestra ningún cuerpo desnudo de sus protagonistas, a pesar de
que estamos frente a una historia con un fortísimo contenido sexual.
* * * * *
Para terminar, podemos decir que Lila dice es una película
que habla de la difícil tarea que es “crecer” al convivir con el amor, la
sexualidad, el erotismo, el racismo, la violencia y la intolerancia. Es una
película muy bien hecha, independiente de que haya sido solo la segunda
realizada por su director y de que haya la adaptación de un libro anónimo de
fines del siglo pasado. Es una verdadera obra de arte, reconocida en grandes
festivales internacionales de cine.
Texto original de Patricio Miguel
Trujillo Ortega.
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